martes, 30 de abril de 2013







Ernesto Sábato entró al túnel eterno, hace dos años








El próximo 24 de julio cumpliría 100 años. La Feria del Libro de Buenos Aires, que comenzó la semana pasada, tenía previsto ofrecerle hoy un homenaje. 


Ernesto Sábato, el laureado escritor que según sus propias palabras “descendió a los infiernos’, para investigar los crímenes cometidos por la última dictadura en Argentina, falleció ayer a causa de bronquitis. 

Era el último mito viviente de la literatura argentina y fue figura fundamental en la defensa de los Derechos Humanos . 

El autor de El túnel, Sobre héroes y tumbas, así como Abaddón, el exterminador, entre otras obras que denotan profunda preocupación humanista, tenía 99 años. 



Hace unos días su hijo, el director de cine Mario Sábato, anunció que proyectaba restaurar la casa del barrio Santo Lugares en donde vivía desde 1945 el escritor, para convertirla en museo y así hacer realidad el sueño de su padre. 

Sábato será velado en el Club Defensores del mismo barrio, tal como él lo pidió, dijo su hijo, quien el año pasado estrenó una película sobre la trayectoria de quien en 2007 fue propuesto como candidato al Nobel. 



Pero Sábato se fue sin el más grande galardón de la literatura mundial, y Argentina y el mundo lo lloran. “Se ha ido un faro de la ética”, dijo el ministro de Cultura de ese país. Debido a su ceguera, en los últimos años se vio obligado a dejar la lectura y la escritura y a llenar su espacio con la pintura. Sus obras, influenciadas por su estancia en París, donde conoció al chileno Roberto Matta y al español Óscar Domínguez —grandes del surrealismo— tenían ese estilo, con dramático color, tal vez reflejando el desgarro que percibía en la sociedad.

En otra faceta hizo parte de la comisión que elaboró el ‘Informe Sábato’, que abrió el camino a la acción de la justicia contra la dictadura argentina. 

 


Crítico con el peronismo, sus estudios los encaminó al ámbito científico, doctorándose en Física por la U. de la Plata. Trabajó en el Laboratorio Curie, en París, y en el Tecnológico de Massachussets, pero en coherencia con su pensamiento abandonó la universidad y se retiró con su esposa, Matilde Kuminsky-Ritcher, a un rancho sin agua ni luz, en la provincia de Córdoba. “No teníamos luz en casa, pero nos iluminaron los afectos y un hijo recién nacido”, le dijo a Tomás Álvarez, de la agencia Efe, quien fue su amigo. Al enviudar, compartió sus últimos años con Elvira González.

 




 
Ejemplo diáfano




El maestro Ernesto Sábato tiene el mérito de ser el paradigma de la ética en la literatura latinoamericana. Su postura inflexible frente a la farsa humana, la hipocresía social y las dictaduras políticas lo ubican como un ejemplo diáfano de lo que, como ciudadano, debe ser un escritor. Por otro lado, su obra novelística bucea en las esencias contradictorias del ser y la sociedad. Bajó, a su manera, a los infiernos, y no se metió mentiras sobre la condición humana. 

Su obra ensayística, aunque estructuralmente fragmentaria, echa una mirada profunda al arte, a la política, a la filosofía, a la ciencia, a la misma literatura. 



Sábato, además, demostró que las ciencias y las artes no están disociadas, que poseen vasos comunicantes más cercanos de lo que imaginamos. Que un físico de origen, como él, puede dar el viraje y acoger y expresar en su corpus creativo diversas manifestaciones estéticas del ser. Sábato también pudo decir: Confieso que he vivido.

 




 
Referencia ética y literaria


Ernesto Sábato, creador de atmósferas inquietantes y personajes atormentados, se convirtió en leyenda. Una existencia, al filo de un centenario, y una obra marcada por novelas como ‘Sobre héroes y tumbas’, ‘El Túnel’ y numerosos ensayos, se ubica en una referencia ética y literaria inexcusable en la literatura. Era su entrada en el arte que no abandonaría jamás. Hoy nos empeñamos en que la literatura es lenguaje, y lo es indudablemente, pero hemos perdido hondura, hemos perdido verdad. Vale recordar que el editor francés Gallimard quería publicar traducida ‘El túnel’, y el veredicto lo tuvo Albert Camus: “Espero encuentre en Francia lo que merece. Me alegraría conocerlo personalmente”. Era su consagración. 





Biografía


(Rojas, Argentina, 1911) Escritor argentino. Ernesto Sábato se doctoró en física en la Universidad de la Plata e inició una prometedora carrera como investigador científico en París, donde había ido becado para trabajar en el célebre Laboratorio Curie. Allí trabó amistad con los escritores y pintores del movimiento surrealista, en especial con André Breton, quien alentó la vocación literaria de Sábato. En París comenzó a escribir su primera novela, La fuente muda, de la que sólo publicaría un fragmento en la revista Sur. 





En 1945, de regreso en Argentina, comenzó a dictar clases en la Universidad Nacional de La Plata, pero se vio obligado a abandonar la enseñanza tras perder su cátedra a causa de unos artículos que escribió contra Perón. Aquel mismo año publicó su ensayo Uno y el Universo (1945), en el que criticaba el reduccionismo en el que desembocaba el enfoque científico. El ensayo prefiguraba buena parte de los rasgos fundamentales de su producción: brillantez expositiva, introspección, psicologismo y cierta grandilocuencia retórica. 

Su carrera literaria estuvo influida desde el principio por el experimentalismo y por el alto contenido intelectual de sus obras, marcadas por una problemática de raíz existencialista. Así, El túnel (1948) ahonda en las contradicciones e imposibilidades del amor, mientras que Sobre héroes y tumbas (1962) presenta una estructura más compleja, en que los diversos niveles de la narración enlazan vivencias personales del autor y episodios de la historia argentina en una reflexión caracterizada por un creciente pesimismo. Ambas novelas tuvieron gran repercusión y situaron a Sábato entre los grandes novelistas latinoamericanos del siglo. 



El Túnel fue rápidamente traducida a diversos idiomas y llevada al cine. La narración tiene indudable originalidad y valores psicológicos relevantes: la confesión de Castel, que ha cometido un crimen, enfrenta al hombre de hoy con una sociedad desquiciada y resalta los contrastes con pincel agudo y lleno de color. El estilo está en consonancia con el tema, dentro de un desequilibrado equilibrio. 

Sobre héroes y tumbas (aunque publicada en 1962, la edición definitiva es de 1966) es su obra más ambiciosa. La compleja construcción de esta novela, y los diversos registros del habla rioplatense que el autor plasma en ella se alejan tanto del tecnicismo formal como de la dispersión. La pericia narrativa de Sábato consiste, justamente, en hacer pasar desapercibidas para el lector las evidentes dificultades compositivas que supone la historia de la joven Alejandra y, a través de ella, la del país. Destaca sobre todo el capítulo titulado "Informe sobre ciegos", que puede ser leído, como de hecho lo fue, con entera autonomía. 



Sobre héroes y tumbas obtuvo un éxito de público impresionante, que acabó por convertir a su autor en una autoridad moral dentro de la sociedad argentina, una suerte de formador de opinión que, por paradójico que parezca, al asumir ese papel se fue alejando progresivamente de la actividad literaria. Su tercera novela, Abaddón el exterminador (1974), se centra en torno a consideraciones sobre la sociedad contemporánea y sobre el pueblo argentino, su condición «babilónica» y su presente, que adquieren en la novela una dimensión surreal, en que se funden realidad y ficción en una visión apocalíptica. 



A partir de la década de 1970, más que un escritor, Sábato representó una conciencia moral que actuaba como un llamado de alerta frente a una época que él no dudó en calificar de "sombría". Esa identificación entre Sábato y la autoridad ética quedó muy reforzada por su labor como presidente de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP), para la que fue designado en 1983 por el entonces presidente de la República, Raúl Alfonsín. Los años que dedicó a investigar "el infierno" de la represión durante el anterior gobierno militar, según sus propias palabras, no le dejaron aliento ni espacio para la literatura. La conclusiones de la comisión quedaron recogidas en el llamado Informe Sábato. En 1984 fue galardonado con el Premio Cervantes. 

La obra de Sábato, que ha sido prestigiada con numerosos premios internacionales y difundida en múltiples traducciones, incluye además multitud de ensayos como Hombres y engranajes (1951), El escritor y sus fantasmas (1963), El otro rostro del peronismo (1956), Tango: discusión y clave (1963), La cultura en la encrucijada nacional (1973), Tres aproximaciones a la literatura de nuestro tiempo (1974), Apologías y rechazos (1979), Antes del fin (1998) y La resistencia (2000). Aquejado de un grave problema de visión, se ha dedicado a la pintura, otra de sus pasiones.

 

lunes, 29 de abril de 2013


Pasos Hacia el Ser. El Texto que Erich Fromm Decidió no Publicar.
(De próxima publicación en la revista del Instituto Mexicano de Psicoanálisis)
Alejandro Córdova Córdova
Instituto Mexicano de Psicoanálisis
 
Resumen
En 1991 se publica el volumen No. 1 de la obra póstuma de Erich Fromm titulado Del Tener al Ser .En el prólogo que hace Rainer Funk   se informa que en este texto se exponen 120 páginas que constituían un capítulo del libro ¿Tener o Ser? que se titulaba Pasos hacia el Ser y que Fromm decidió no publicar. Esto ha dejado un hueco o vació, muy importante, creo yo, en la comprensión de algunas ideas que sobre la teoría y la técnica psicoanalítica elaboró Fromm en la última década de su vida. Entre ellas quizá la más importante es un modelo para llevar a cabo el autoanálisis.
En el prólogo que Rainer Funk escribió en el  libro“Del Tener al Ser” primer volumen de la obra póstuma de Erich Fromm leemos lo siguiente: “Pero publicamos también los capítulos  omitidos para familiarizar a los lectores del libro ¿Tener o Ser? con aquello que, en su mayoría, echaron de menos justificadamente: qué pasos concretos puede dar cada uno para practicar la orientación al ser.  Al principio, Erich Fromm dedicó todo un capítulo, de 120 páginas en el original, al tema de los “ Pasos hacia el Ser” ; pero al terminar de escribirlo, lo eliminó  del libro para sustituirlo por otro que tituló El hombre
nuevo y la sociedad nueva, en el cual indicaba detalladamente de qué manera deben transformarse las estructuras  y los valores espirituales y religiosos y, sobre todo , los socioeconómicos, si ha de ofrecerse al individuo una oportunidad de pasar, de la orientación al tener, a la orientación al ser (p.13)
A continuación Rainer expone la razón de por qué Fromm decidió no publicarlo: “Erich Fromm creía que el texto  “Pasos hacia el Ser”  podría  interpretarse mal, en el sentido  de que sólo se tratase de buscar cada uno su salvación en la conciencia, el propio desarrollo y el autoanálisis, como si así pudiera surgir  la sociedad nueva, orientada al ser. Olvidándose la conexión que la orientación al tener tiene sus causas en las condiciones  económicas, políticas y sociales de la sociedad moderna.”(p.13)
El prologo de Rainer al libro Del Tener al Ser  termina con una advertencia muy interesante e inquietante que, yo interpreto, en el  sentido de que el texto puede contener algunos errores y de hecho los tiene: “Los texto que se presentan ahora por primea vez no han sido examinados por su autor para su publicación, de modo que hemos debido ordenarlos, sistematizarlos y añadirles títulos. Cuando se añaden u omite parte del texto, se indica con (…).Para su mejor comprensión, hemos añadido a veces entre paréntesis el término original en Ingles. Debo a mi mujer, Renate Oetker-Funk, muchísimas propuestas de corrección del texto y del estilo, precisamente en los lugares que Erich Fromm no había retocado aún”(p.14)
Por su parte Fromm nos dice lo siguiente para comprender su texto:
“En este breve repaso, es imposible informar con suficiente claridad y detalle sobre la meditación budista, según se practica en la escuela Theravada, a la que pertenece Nyanaponika Thera. Por tanto a quien se interese seriamente por la meditación para ampliación de la conciencia no puedo sino recomendar que estudie “El corazón de la meditación budista”.(p.70) Y si vamos al texto de Nyanaponika Thera que Fromm recomienda que leamos, veremos que también tendremos que leer algunos otros textos del Canon pali en los cuales se apoya Nyanaponika Thera.
Y en un texto escrito por Fromm en alemán en 1976 titulado El significado de Nyanaponika Mahathera para el Occidente” y utilizado como prologo para la publicación en Estados Unidos de una selección de artículos de  Nyanaponika Thera (The Vision of Dhamma, 1986) dice lo siguiente: “el encuentro con los trabajos de Nyanaponika Thera me ha producido significativos insights  y también a aquellos a quienes  he recomendado que estudien su texto. Muchos de ellos me han informado que   este  texto constituyó el comienzo de una nueva orientación y una nueva práctica. Estoy convencido que los trabajos de Nyanaponika  Thera pueden llegar a ser  una de las más importantes contribuciones para una renovación espiritual de Occidente si ellos son conocidos por un número suficiente de persona”.
 
Los  capítulos suprimidos
El texto suprimido se expuso en  el libro “Del Tener al Ser” en los tres capítulos siguientes:
Cap. II. Extravíos de las conciencia
Cap. III. Caminos de la Conciencia
Cap. IV. El autoanálisis como medio para conocerse a si mismo.
 
Los capítulos que los sustituyeron en el  libro ¿Tener o Ser?
En la tercera parte del libro ¿Tener o Ser? titulada “El hombre nuevo y la sociedad nueva” se exponen los capítulos que sustituyeron a los suprimidos
Capítulo Vll
Religión, carácter y sociedad
Capitulo Vlll
Condiciones del cambio humano y características del Hombre nuevo.
Capítulo IX
Características de la nueva sociedad
Solo comentaré brevemente  algunos puntos con el objeto de mostrar la necesidad de corregir y agregar algunas notas a los capítulos  del libro Del Tener al Ser.
En el capitulo ll, titulado “Los extravíos de la conciencia”  Fromm hace una critica de toda una serie de métodos que hoy  abundan y se exponen en la llamada literatura de autoayuda. Al respecto escribe Fromm: “Durante los años cincuenta y sesenta, fueron muchísimos los que buscaban nuevos caminos de felicidad. Y empezó a formarse un mercado a gran escala. California, en particular, fue tierra fecunda para la mezcla de métodos legítimos, como algunos de los citados, con otros de pacotilla, que en breves cursos, en una especie de buffet libre espiritual, prometían  sensibilidad, gozo, penetración, conocimiento de si mismo, aumento de la afectividad, relajación” (…) “ La mentira en estos métodos reside en la superficialidad de la doctrina, en especial cuando pretenden basarse en el pensamiento de los grandes maestros; pero, casi siempre, en prometer – franca o tácitamente – una transformación  profunda de la personalidad, cuando lo que se da es una mejora transitoria de los síntomas o, a lo sumo, una estimulación de la energía y un poco de relajación. En lo esencial, estos métodos  sirven para sentirse mejor sin tener que variar mucho el carácter, al mismo tiempo que uno se va adaptando a la sociedad” (p.29) (…) “La existencia y popularidad de este movimiento no debe sorprender más  que la de ciertos medicamentos. Lo sorprendente es que, entre sus adictos y defensores, como sé por experiencia, haya personas de integridad incuestionable, gran inteligencia y enorme penetración psicológica: Debo admitir que me desconcierta. Su reacción positiva se debe, desde luego, a la relajación y energía que proporcionan los ejercicios de meditación. Pero lo desconcertante esa que no les repelan la confusión de su lenguaje, su tosco espíritu de Relaciones Públicas, la exageración de las promesas, o el mercado que se forma alrededor del negocio de la salvación.”(p.32)
En el prologo del libro Rainer Funk también comenta sobre esto lo siguiente: “La evolución en los últimos años ha mostrado que, por conciencia, desarrollo y autorrealización, casi siempre se entiende otra cosa: el fortalecimiento de las energías subjetivas del hombre, que no hace, la mayoría de las veces, sino reforzar el propio narcisismo y confirmar la incapacidad de amor y razón ( que, según Fromm, son siempre las características de la orientación al ser), pues estas técnicas de conciencia ofrecen nuevas bases para la orientación al tener”(12)
Capitulo III
 
Caminos de la Conciencia
En este capitulo  Fromm nos entera del tipo de meditación que ha descubierto y se encuentra practicando bajo la guía  de Nyanaponika Mahathera y del cual también Funk nos ha informado lo siguiente en su libro “Fromm, Vida y Obra”(1987) “Para le experiencia religiosa como experiencia del si mismo superior, se requieren ejercicio y disciplina. De estos daba ejemplos Fromm. Diariamente, entre las 10 y 11 horas, hacía ejercicios de respiración, de movimientos y concentración, tal como lo había aprendido de Nyanaponika Mahathera, un monje budista de Sri Lanka nacido en Alemania. Para lealmente a los ejercicios de meditación, realizaba Fromm su autoanálisis  diariamente en base a sus sueños:” (p.189).
Es importante aclarar que lo que Nyanaponika Thera le enseñaba a Fromm no eran ejercicios de respiración y  movimientos, algo que el mismo Fromm explica en el capitulo  Caminos de la conciencia del libro  Del Tener al Ser, en donde escribe lo siguiente: “Lo primero que se ejercita para aumentar la atención es la respiración. Es, como subraya el autor, (Nyanaponika Thera en el Corazón de la meditación budista), “un ejercicio de atención, no de respiración. “En la práctica budista, no hay “retensión” de respiración. Ni se interviene en ella de ninguna otra manera. No hay más que una “mera observación” tranquila de su flujo natural, con atención firme y constante, pero laxa y sostenida, es decir sin tensión ni rigidez. Se advierte la lentitud o rapidez de la respiración, pero no se la regula deliberadamente.”
Lo que Fromm esta aquí exponiendo esta en el texto canónico el Satipatthana-Sutta, el cual incluye Nyanaponika Thera en su libro “El Corazón de la meditación Budista” . Allí esta incluido el sermón  de la Atención a la Respiración (anapanasati) que consta de  cuatro tétradas en la que se captan una serie de cualidades de la respiración ; si la respiración es prolongada, breve, tranquila, violenta, rápida, lenta. Se aprende a examinar la naturaleza, características y funciones de cada tipo de respiración que surge..
En cuanto a los movimientos que el texto dice Nyanaponika le enseñaba a Fromm eran seguramente la meditación caminando, un tipo de meditación muy importante para el budismo que se enseña en Birmania en el “Thatana Yeiktha” en Rangún hoy Myanmar. A esta enseñanza dedica Nyanaponika Thera en su libro el Corazón de la Meditación Budista el capítulo V, titulado “El método Birmano del Satipatthana.
 
Declaración de Fromm
Con estos breves antecedentes podemos comprender un poco ñla declaración que Fromm hace respecto a su prática meditaiva que a la letra dice:“En la meditación budista  he encontrado una  forma sencilla , no engañosa y no sugestiva de meditación, que tiene el fin de acercarnos a la meta budista: la suspensión  de la codicia , el odio  y la ignorancia” (…) “El cultivo de la recta atención sigue siendo el método más sencillo y directo, el más completo y eficaz, de adiestramiento  y desarrollo  de la mente para sus tareas y problemas cotidianos, así como para el fin más elevado: la propia y definitiva liberación espiritual de la codicia, el odio y el engaño” ( En la psicología budista estas se consideran las tres raíces de lo insano)(p.68)
Subcapitulo 3 titulado “Hacerse conciente” comienza con la pregunta ¿Qué significa hacerse conciente? Y la respuesta que  se da es: “Conciencia” significa un saber profundo, total y participativo, por el que descubrimos, “reconocemos” o “nos damos cuenta” de algo inesperado o que no era patente. En otras palabras: “hacerse consciente” significa “enterarse” (integrase, completarse) en estado de atención concentrada” (¿Con este término se esta refiriendo Fromm a la fase de concentración de la meditación de atención plena o vipassana? es posible)
Y continúa  con un párrafo que dice “Veamos ahora distintas aplicaciones ( ¿de la atención concentrada?). “La conciencia puede referirse al propio cuerpo o al propio estado psíquico es decir a los sentimientos y estado de ánimo” .Estos son  tres  de los cuatro objetos en que se entrena la atención según el Satipatthana (falta el cuarto objeto, que es el de las sensaciones.) .Nyanaponika  Thera expone esto en  un texto del Corazón de la Meditación Budista que  se titula: Los cuatro objetos de la atención: Cuerpo, Sensación, Estados de la Mente y Contenidos mentales. Para cada uno de estos objetos se describe un método de meditación y Nyanaponika tiene un pequeño libro dedicado especialmente a la Meditación de las Sensaciones (1986) que el considera fundamental.
En otro párrafo se dice: “En la meditación budista clásica (es decir Vipassana), según la describe Nyanaponika  Mahathera, después de la atención a la respiración vienen la atención a las posturas, la clara comprensión  de todas las funciones del cuerpo, clara conciencia de los sentimientos, del propio estado de ánimo (Conocimiento de si mismo) y de los pensamientos”
Algo muy importante de este párrafo es la palabra (Clara comprensión),  que es un   importantísimo concepto el cual se expone  en el libro El  Corazón de la meditación budista en  dos capítulos  titulados Clara CompresiónLas Cuatro formas de Clara Comprensión.  Allí se describen cuatro clases de Clara comprensión: Clara Comprensión del propósito. Clara Comprensión de la idoneidad. Clara Comprensión del terreno de la meditación y Clara compresión  de la realidad, literalmente de la No-ilusión. De esta última clara compresión Nyanaponika dice: “mediante la comprensión nítida de la realidad se elimina el más profundo y obstinado engaño del hombre: su creencia en un yo, un alma o una sustancia eterna de cualquier tipo. Este abordaje de la clara comprensión es de gran utilidad clínica y esencial en nuestro intento de aplicar la meditación en la vida cotidiana.
Subcapítulo 4;
Concentrarse
Subcapítulo 5;
Meditar
Concentración
El orden de estos  capítulos  no es correcto. El capítulo debería titularse Meditación y a continuación los dos subcapítulos que se titularían Atención y Concentración. Y si queremos ser más precisos ya que estamos hablando de la meditación clásica de la escuela Theravada se debería decir  Recta Atención y Recta Concentración lo que significa que nos estamos refiriendo  a estos conceptos como dos factores de los ocho del Noble Octuple Sendero.
Generalmente en todos los textos de meditación la forma en que esto se expone es que la concentración es un tipo de meditación llamada samatha, la cual se practica en la mayoría de las tradiciones que practican la meditación y la vipassana  que es la propiamente  budista. En la meditación vipassana  se practican tanto  la atención como  la concentración.
Después el texto expone la forma de  aprender a concentrase: “Como primer ejercicio, sugiero que se practique la tranquilidad. Lo cual puede significar, en concreto sentarse tranquilo durante unos diez minutos, por ejemplo sin hacer nada ni, en lo posible pensar en nada, pero atendiendo a todo lo que ocurre dentro de nosotros” y más adelante escribe “ Cuando se  haya conseguido cierto grado de tranquilidad, será conveniente  añadir ejercicios de concentración directa durante el ya descrito o después, práctica  que  puede hacerse de muchas maneras :una puede ser  observar una moneda concentrándose  completamente en todos sus detalles hasta el momento en que la vemos con  todos sus detalles  o se puede usar cualquier otro objeto, una flor, un teléfono incluso una palabra (en el Canon Pali se habla de 40 objetos o temas básicos de meditación y 26 de ellos no son indicados para la meditación vipassana o de atención plena)
Después el texto nos habla del esfuerzo de rechazar los pensamientos como un obstáculo y a continuación  nos dice que hay un obstáculo peor que es el sueño que puede invadirnos mientras meditamos y ya no menciona los otros cuatro obstáculos clásicos y como vencerlos. Los obstáculos clásicos  son: el apetito sensual, la ira, la pereza y el sopor, el desasosiego y la ansiedad y la duda y se mencionan dos tipos de duda la escéptica “para que me sirve esto” y la de impotencia “esto es muy difícil, no podré hacerlo”.  Estos obstáculos son parte de  los objetos o factores mentales en que se entrena la mente y que Nyanaponika expone en el capitulo  del Corazón de la Meditación Budista titulado“La contemplación de los objetos de la mente” que incluyen además;  de los  cinco obstáculos, Los Cinco Agregados del Apego. Las Seis Esferas Internas y Externas de los Sentidos. Los Siete Factores de la Iluminación. Las Cuatro Nobles Verdades.
Y podría continuar mostrando  más ejemplos pero aquí solo se trata de elegir algunos para ilustrar la necesidad de aclarar una serie de ideas y conceptos del texto a través de notas.
Subcapitulo 5
Meditar
El párrafo que inicia este  capítulo es muy interesante y a la letra dice: “De la práctica de la concentración, hay un camino que nos lleva directamente a uno de los preparativos fundamentales para aprender el arte de ser: meditar
Yo me pregunto
¿Por qué la meditación es un preparativo fundamental para aprender el arte de ser? esto es  algo que no se explica en libro y que puede ser comprendido si acudimos a la literatura de la tradición budista Theravada.
En este capitulo Fromm  divide la meditación en dos tipos: la que usa la sugestión y la meditación budista que según Fromm no es sugestiva (la división clásica es Samatha o de concentración  y Vipassana) (¿Por que Fromm hace esta  división?  )
En los textos budistas encontramos que la práctica de la meditación comprende dos grandes ramas  samatha y vipassana. Al respecto Amadeo Solé-Leris (1986)  escribe lo siguiente: “Samatha quiere decir “serenidad”, “calma”, “sosiego”. La meditación  Samatha, o meditación de serenidad, persigue la realización de estados de conciencia que se caracterizan por un grado cada vez más elevado de serenidad y sosiego de la mente. Comprende dos factores, a saber: la consecución de un máximo  grado de concentración mental, y el apaciguamiento concomitante de los procesos psicomentales (p.28)
“Vipassana significa literalmente, “ver del todo”, “ver a la perfección”, o sea ver las cosas integralmente, cabalmente, tal y como son. Se ha traducido en distintas ocasiones por “visión penetrante”,”visión interior profunda” o visión cabal” (p.30).
“En la antigua práctica tradicional, el meditador cultivaba normalmente ambos ejercicios: Samatha para cultivar la capacidad de concentración y para serenar el ánimo, y vipassana para realizar la visión liberadora”.(p.31)
En los párrafos anteriores sólo he seleccionados algunas pocas ideas pues exponerlas todas sería muy largo. La serie de ideas y conceptos que Fromm expone  en los capítulos antes expuestos  es casi imposible comprenderlos sin recurrir al libro que él mismo recomienda “El Corazón de la meditación budista” de Nyanaponika Thera.
Capítulo lV
El autoanálisis como medio para conocerse a si mismo.
Sin la lectura del libro de Nyanaponika Thera es casi imposible comprender  por que Fromm recomienda combinar la meditación budista con el autoanálisis.
La propuesta de   Fromm es  pionera en proponer un modelo de aplicación de la meditación budista pues lo hace entre 1974 y 1976. El modelo más antiguo  de aplicación de la meditación budista es el que  creó Jon Kabat-Zinn en 1979 denominado Reducción de estrés basado en la atención plena y que desde entonces (30 años) se enseña en el Centro Médico de la U. de Mss.
Una explicación amplia sobre el autoanálisis la he desarrollado en otro artículo y es posible que el próximo año (2011) intentemos desarrollar en el IMPAC esta interesantísima propuesta de Fromm .
Fromm incluye al autoanálisis en lo que el denomina función transterapéutica  del psicoanálisis y propone que algunos psicoanalistas deberían especializarse en él y dedicar parte de su consulta a ello.
 
Texto del  tener o ser que sustituyo al de pasos hacia el ser.
El texto corresponde a la tercera parte del libro Titulado El Hombre Nuevo y La Sociedad Nueva la cual incluye tres capítulos: VII. Religión, carácter y Sociedad. VIII. Condiciones del cambio humano y características del hombre nuevo. IX. Características de la sociedad nueva.
Al leer estos capítulos del libro “Tener o Ser” no se debe olvidar que Fromm esta respondiendo o corrigiendo aquella duda que lo hizo no publicar el texto de los pasos hacía el ser. Pero cuando publicó el libro ¿Tener o Ser?  nosotros ignorábamos esta relación pues el texto lo  había suprimido.
Estos capítulos ilustran hasta donde Fromm consideraba que el budismo podía ser la fuente de conocimiento para intentar no solo un psicoanálisis más allá de la propuesta terapéutica convencional sino los principios de uan sociedad más humana
En el   capitulo VllI, “Condiciones del cambio humano y características del hombre nuevo” Fromm afirma lo siguiente:
“Yo sostengo que el carácter humano puede cambiar si existen estas condiciones:
  1. Sufrimos y nos damos cuenta de ello.
  2. Reconocemos el origen de nuestro malestar
  3. Reconocemos que existe una manera de aliviar nuestro malestar.
  4. Reconocemos que para aliviarnos nuestro malestar debemos seguir ciertas normas de vida y cambiar nuestra presente conducta.
Estos cuatro puntos corresponden a las Cuatro Nobles Verdades, que son la base de las enseñanzas del Buda y que se relaciona con la condición general de la existencia humana, pero no con los casos de malestar humano producidos por las circunstancias sociales o individuales” (p.160)
Incluso Fromm comenta que este mismo principio de las Cuatro Nobles Verdades esta en la propuesta de Marx y al respecto escribe lo siguiente: “El mismo principio del cambio  que caracteriza los métodos del Buda también fundamenta el concepto marxista de salvación”.  Y también considera que los mimos principios están en el método curativo de Freud. (P.161)
El capítulo termina con dos páginas en que propone las características del hombre nuevo y que a la letra dice: “La función de la sociedad nueva es  alentar el surgimiento de un Hombre nuevo, ser cuya estructura de carácter tendrá las siguientes cualidades (propone 21) (p.162) Mencionaré solo algunas que ilustran con claridad su relación con el budismo.
La primera. Disposición a renunciar a todas las formas de tener, para poder ser plenamente. El tema de la renuncia es fundamental en la psicología budista. El momento en que Shiddharta abandona  su hogar y familia se le denomina la Gran Partida (Pabajja) o gran renuncia y así se domina el momento en que el individuo abandona la sociedad para convertirse en monje.
La quinta, sentir la  alegría que causa el dar y compartir, y no acumular y explotar. (Generosidad es la primera virtud que Shiddharta Gautama decidió llevar a la perfección cuando hace millones de siglos decidió ser un Buda). En la psicología budista se dice que la recompensa del ejercicio de la generosidad  es la alegría).
La sexta. Amar y respetar la vida en todas sus manifestaciones (este es el primer  precepto budista).
La séptima. Tratar de reducir en la mayor medida posible la codicia, el odio y los engaños (en la psicología budista esto se consideran las tres raíces de toda impureza o de todo lo insano)
Y para terminar y  ya que el tema de esta reunión anual  es sobre la Vigencia de Dios, en el penúltimo párrafo de estos capítulos que sustituyeron a los pasos hacia el ser Fromm escribe lo siguiente: “Desde luego, para los que no están auténticamente enraizados en la religión teísta, la cuestión crucial es la conversión a una “religiosidad” humanista sin religión, sin dogmas ni instituciones, a una “religiosidad” preparada desde hace mucho por el movimiento de una religiosidad atea, desde Buda hasta Marx. No tenemos que elegir entre un materialismo egoísta o la aceptación del concepto cristiano de Dios. La vida social misma (en todos sus aspectos: en el trabajo, en el tiempo libre, en las relaciones personales) será la expresión del espíritu “religioso”, y no se requerirá tener una  religión determinada
Y en unas páginas inéditas, de un  artículo que Fromm estaba escribiendo sobre el budismo a partir de su experiencia con Nyanaponika Thera , y  de las cuales solo se tomaron algunos párrafos para incluirlos en los textos póstumos se encuentra el  párrafo: siguiente: “Las enseñanzas de Buda son considerablemente más radicales que las de cualquier lector de hoy en día: eliminar a Dios, hacer al individuo completamente responsable de sus acciones, privarlo de todas sus ilusiones, trascender toda alianza de clases y naciones y proponer una alianza en nombre de la verdad, sólo unos cuantos de los pensadores más radicales actuales se puede decir que han alcanzado tal nivel de radicalismo”.
 
BIBLIOGRAFIA
 
  1. Fromm, E. (1991) Del Tener al Ser. España: Paidos.
  2. Fromm, E. (1978) ¿Tener o Ser? México: Fondo de Cultura Económica.
  3. Thera, Nyanaponika (1986) The Vision of Dhamma. Great Britain: Samuel WEISER, INC.
  4. Thera, Nyanaponika (1986) La Meditación sobre las Sensaciones. Barcelona: CEDEL
  5. Funk, R. (1987) Fromm Vida y Obra. Argentina: Paidos,
  6. Amadeo, S. L. (1986) La Meditación Budista: España: Martínez Roca, S. A.
  7. Kabat-Zinn, J. (2005) Viviendo a Plenitud las Crisis. España: Kairos
   

domingo, 28 de abril de 2013


Acción con retardo Hoffman, en los ‘70, comenzó a dirigir una película. Pero paró. Tres décadas después, el actor de “Rain Man” volvió al ataque./DIAMONDAmpliar

Acción con retardo Hoffman, en los ‘70, comenzó a dirigir una película. Pero paró. Tres décadas después, el actor de “Rain Man” volvió al ataque./DIAMOND

Acción con retardo Hoffman, en los ‘70, comenzó a dirigir una película. Pero paró. Tres décadas después, el actor de “Rain Man” volvió al ataque./DIAMOND

Dustin Hoffman: debutante... a los 75 años



Dirigió su opera prima, que se estrena el jueves. “Postergamos las cosas porque no nos sentimos con derecho a hacerlas”, sostiene el hombre que le dijo no a Bergman y a Fellini.

Desde que comenzó a actuar hace 45 años, en El graduado, donde interpretaba a un virginal Benjamin Braddock a punto de ser educado en las cosas del amor y la lujuria, Dustin Hoffman se destaca por su voz, una voz tan lenta, profunda y sonora como crema batida mezclada con gravilla. Hoffman es un actor extraordinariamente convincente: cuando transpira en Perros de paja, el sudor es real; uno casi puede olerlo cuando hace del linyera rengo Ratso en Perdidos en la noche; y cuando se pone vestido y tacos en Tootsie, uno sabe que aprendió a caminar como una señora... pero al final todo pasa por su voz.
Es sorprendente lo contadas que son las películas malas y el alto porcentaje de clásicos que hay en el catálogo de Hoffman: además de las mencionadas, están Todos los hombres del presidenteMaratón de la muerteKramer vs. Kramer. Y hasta ganaron un Oscar (Rain Man), por la que él también ganó.
Pero hoy la voz esta aquí para hablar de dirigir más que de actuar. Treinta y seis años después de empezar a filmar, Hoffman por fin ha completado una a los 75.
Rigoletto en apuros es un filme optimista sobre un hogar para cantantes de ópera jubilados, dirigido con calidez y destreza. ¿Por qué tardó tanto en dirigir?
“Es uno de mis demonios, supongo. Lo era, hasta ahora”, dice. Retrocede a mediados de los ‘70 cuando compró los derechos del libro No Beast so Fierce (Ninguna bestia tan feroz), sobre un reincidente preso en San Quintín. Hoffman pasó dos años reuniendo el dinero y eligiendo actores y técnicos para la película, entonces llamada Straight Time(Horario corrido), y empezó a dirigir. Y el actor que es famoso por decir a los directores cuándo algo les salió bien, descubrió que no podía tomar una decisión ni aunque de ello dependiera su vida. “Me despedí a mí mismo porque no teníamos playbacks ”. Bah, dice, es sólo una excusa. Se echó porque había perdido el coraje.
¿Tenía razón en darse una patada? “No. Después me pareció que había perdido una oportunidad. Todos hacemos eso; postergamos las cosas porque no nos sentimos con derecho a hacerlas”.
Hoffman tiene una larga historia de oportunidades desperdiciadas. “Hay muchas películas que rechacé -dice-. Ese es otro de mis demonios. Rechacé proyectos maravillosos”. ¿Por ejemplo? “Ingmar Bergman, porque mi primera mujer estaba embarazada y no quería dejar a su obstetra de Nueva York para ir a Suecia. Uno puede encontrar razones para dejar de hacer cualquier cosa”.
Vuelve a la lista. “Ah, también rechacé a Fellini. No filmaba con sonido normal. Lo hacía con una banda de guía porque después todo se dobla, y pensé que eso iba a comprometer mi actuación. Le dije que pagaría para que se hiciera con sonido directo, pero me dijo que no, que él trabajaba así. Adoro a Fellini, y lo rechacé”. Es ridículo, le digo. Asiente. “Yo siempre buscaba razones para no hacer algo. Pero tengo una mejor”, continúa. No sé si está fanfarroneando o dándose con el hacha. “Una vez tenía que encontrarme con Samuel Beckett en un bar de París para hacer una reposición de Godot, y lo dejé plantado. Empecé a dar vueltas a la manzana, pero no pude entrar. Sí. Simulé que no sabía que la cita era ese día”.
¿Lo hacía por haragán? No, aclara. “No era una excusa para no trabajar... Me costaba darme permiso para tener éxito. Me habría sentido mucho más cómodo si la actuación apenas me hubiese alcanzado para ganarme la vida, que era lo máximo que esperaba. Decía que El graduado era un accidente insólito”.
Pasamos a la nueva película y a cómo finalmente se deshizo de ese demonio. A diferencia de la primera vez que intentó dirigir, en Rigoletto en apuros Hoffman no actúa. Aunque la película, adaptación de la obra teatral de Ronald Harwood, deja en claro que la vejez no es para los remilgados, también es un himno al espíritu humano. Lo que deja ver es la capacidad de Hoffman para sacar lo mejor de su reparto de estrellas británicas (Michael Gambon, Billy Connolly, Pauline Collins, Maggie Smith).
Hoffman dice que la película fue catártica. “Hago terapia desde hace años”, cuenta. ¿Cuánto tiempo fue a terapia por su incapacidad para dirigir? “Unos diez años”. Con un buen terapeuta, agrega, uno puede lograr cualquier cosa. “Me gustaría hacer terapia hasta después de muerto”.
Traducción: Elisa Carnelli


Generar felicidad

Aprende a sentarte en calma y reunirte contigo mismo con tranquilidad. La paz vendrá y se sentará a tu lado.

Vive con sencillez. Eso significa sólo tomar lo que necesitas de la tierra y de la vida. La recompensa es la abundancia.

Permanece liviano. Aplica un punto final a las preocupaciones en un instante. Cuando decides vivir con liviandad en tus pensamientos y acciones, los demás te ven brillar.

Vive ahora. Disfruta de vivir el momento presente, olvida la negatividad, el desperdicio y los arrepentimientos del pasado. La positividad es el primer paso hacia la paz.

Da generosamente, de todo lo que tienes. Compartir tus regalos con los demás, sin contar su coste, garantiza que recibirás incluso más.

Practica la compasión. Encuentra el perdón. Primero para ti mismo. Después aprende que el perdón derrama bendiciones en todas las direcciones. Al perdonar a los demás, somos perdonados y sanados.

Agradece. Sé agradecido por todo lo que has recibido. La gratitud le da valor a todo lo que posees y aumenta tu alegría.

Sé amigo del silencio. Dirige tus pensamientos hacia tu interior, hacia tu esencia más profunda. El silencio invita a Dios a tu corazón y mente.

Sirve a los demás. Disfruta con servir. Pensar y actuar sólo para nosotros trae una recompensa hueca; servir a los demás crea un profundo pozo de satisfacción.

Practica la paz. La paz es la cualidad original del ser. En su forma más pura, la paz es silencio interior. Consiste en pensamientos positivos, sentimientos puros y buenos deseos. Para tener paz necesitas paciencia. Cuando eres pacífico, creas una atmósfera de paz. La paz en el mundo sólo se puede conseguir cuando haya paz en la mente de cada ser humano.

Hay felicidad cuando se usa cada momento de una manera valiosa. La felicidad es la nutrición que más fortalece. Con felicidad, haces fácil lo difícil, y liviano lo que es pesado. Permanecer feliz y compartir felicidad con los demás es un gran acto de caridad. Cuando eres feliz, entonces no importa lo que suceda, nunca sueltes tu felicidad.
 

viernes, 26 de abril de 2013


El credo humanista de Erich Fromm

Fragmento del libroEl humanismo como utopía real “ (Captulo II. Acciones y proclamaciones humanistas, punto 4) escrito por Erich Fromm en 1965.


1.- Creo que la unidad del hombre, a diferencia de otros seres vivientes, se debe a que el hombre es la vida consciente de sí misma. El hombre es consciente de sí mismo, de su futuro, que es la muerte ; de su pequeñez, de su impotencia. Es consciente del otro en cuanto otro. El hombre está en la naturaleza, y sometido a sus leyes, aunque la trascienda con el pensamiento.
2.- Creo que el hombre es consecuencia de la evolución natural : que ha nacido del conflicto de estar preso y separado de la naturaleza y de la necesidad de hallar unidad y armonía con ella.
3.- Creo que la naturaleza del hombre es una incoherencia, debida a las condiciones de la existencia humana, que exige buscarle soluciones, las cuales a su vez crean nuevas incoherencias y la necesidad de nuevas soluciones.
4.- Creo que toda solución a estas incoherencias puede cumplir realmente la condición de ayudar al hombre a superar el sentimiento de separación y a lograr un sentimiento de concordancia, comunidad y participación.
5.- Creo que, en toda solución a estas incoherencias, el hombre sólo tiene la posibilidad de escoger entre avanzar o retroceder. Estas opciones, que se manifiestan en actos precisos, son medios para rebajar o para desarrollar la humanidad que tenemos dentro.
6.- Creo que la alternativa fundamental para el hombre es la elección entre “vida” y “muerte”, entre creatividad y violencia destructiva, entre la realidad y el engaño, entre la objetividad y la intolerancia, entre fraternidad con independencia y dominio con sometimiento.
7.- Creo que podemos atribuir a la “vida” el significado de continuo nacimiento y constante desarrollo.
8.- Creo que podemos atribuir a la “muerte” el significado de suspensión del desarrollo y continua repetición.
9.- Creo que, con la solución regresiva, el hombre trata de encontrar la unidad librándose del insoportable miedo a la soledad y a la incertidumbre, desfigurando lo que lo hace humano y lo atormenta. La orientación regresiva se desarrolla en tres manifestaciones, juntas o separadas : La necrofilia, el narcisismo y la simbiosis incestuosa.
Por necrofilia entiendo el gusto por todo lo que es violencia y destrucción : el deseo de matar, la adoración de la fuerza, la atracción por la muerte, el suicidio y el sadismo y el deseo de transformar lo orgánico en inorgánico sometiéndolo al “orden”. El necrófilo, por carecer de las cualidades necesarias para crear, en su impotencia encuentra más fácil destruir, porque para él sólo una cualidad tienen valor : la fuerza.
Por narcisismo entiendo la falta de un interés autentico por el mundo exterior y un intenso apego a uno mismo, al grupo, clan, religión, nación, raza, etc., con graves distorsiones del juicio racional. En general, la necesidad de satisfacción narcisista deriva de la necesidad de compensar una pobreza material y cultural.
Por simbiosis incestuosa entiendo la tendencia a seguir ligado a la madre y a sus equivalentes : la estirpe, la familia o la tribu ; a descargarse el insoportable peso de la responsabilidad, la libertad y la conciencia, para ser protegido y amado en un estado de seguridad con dependencia, que paga el individuo con el cese de su propio desarrollo humano.
10.- Creo que , escogiendo avanzar, el hombre puede encontrar una nueva unidad mediante el pleno desarrollo de todas sus energías humanas, que se muestran en tres orientaciones, juntas o separadas : la biofilia, el amor a la humanidad y a la naturaleza y la independencia y libertad.
11.- Creo que el amor es la llave principal para abrir las puertas al “crecimiento” del hombre. El amor y la unión a alguien o algo fuera de uno mismo permite trabar relaciones con otros, sentirse uno con otros, sin reducir el sentido de integridad e independencia. El amor es una orientación positiva, para la cual es esencial que se hallen presentes al mismo tiempo la solicitud, la responsabilidad, el respeto y el conocimiento del objeto de unión.
12.- Creo que la experiencia del amor es el acto más humano y humanizador que es dado gozar al hombre y, como la razón, carece de sentido si se entiende de manera parcial.
13.- Creo en la necesidad de “liberación” de los lazos, externos o internos, como condición para poder tener la “libertad” de crear, obrar, querer saber, etc., para poder llegar a ser un individuo libre, activo y responsable.
14.- Creo que libertad es la capacidad de obedecer la voz de la razón y del conocimiento, en contra de las voces de las pasiones irracionales. Es la emancipación que libera al hombre y lo pone en el camino de emplear sus facultades racionales y de comprender objetivamente el mundo y el papel que en éste representa.
15.- Creo que la “lucha por la libertad” tiene, en general, el sentido excluido de lucha contra la autoridad impuesta sobre la voluntad individual. Hoy “lucha por la libertad” debe significar liberarnos, individual y colectivamente, de la “autoridad” a la que nos hemos sometido “voluntariamente” : liberarnos de las fuerzas interiores que exigen este sometimiento porque somos incapaces de soportar la libertad.
16.- Creo que la “libertad de elección” no siempre es igual para todos los hombres en todo momento. El hombre de orientación exclusivamente necrofílica, narcisista o simbiótico incestuosa, puede tomar sólo una opción regresiva. El hombre libre, liberado de lazos irracionales, no puede tomar ya una opción regresiva.
17.- Creo que el problema de la libertad de elección existe sólo para el hombre de orientaciones contrapuestas, y que esta elección siempre está estrechamente condicionada por deseos inconscientes y por justificaciones tranquilizadoras.
18.- Creo que nadie puede “salvar” a su prójimo decidiendo por él. Únicamente podrá ayudarlo señalándole alternativas posibles, con toda sinceridad y amor, sin sensiblería ni engaño alguno. La conciencia intelectiva de las alternativas liberadoras puede reavivar en un individuo sus energías ocultas y ponerlo en el camino en el que escoja la “vida”, en lugar de la “muerte”.
19.- Creo que la igualdad se siente cuando, al descubrirse uno mismo por completo, se reconoce igual a otros y se identifica con ellos. Todo individuo lleva la humanidad en su interior. La “condición humana” es única e igual en todos los hombres, a pesar de las inevitables diferencias de inteligencia, talento, estatura, color, etc.
20.- Creo que la igualdad entre los hombres se debe recordar especialmente para evitar que uno se convierta en instrumento de otro.
21.- Creo que la fraternidad es el amor dirigido a nuestros semejantes. No obstante, se quedará en palabra hueca mientras no se hayan eliminado todos los lazos “incestuosos” que impiden juzgar objetivamente al “hermano”.
22.- Creo que el individuo no puede entablar estrecha relación con su humanidad en tanto no se disponga a trascender su sociedad y a reconocer de qué modo ésta fomenta o estorba sus potenciales humanas. Si le resultan “naturales” las prohibiciones, las restricciones y la adulteración de los valores, es señal de que no tiene un conocimiento verdadero de la naturaleza humana.
23.- Creo que la sociedad ha chocado siempre con la humanidad, aun teniendo una función a la vez estimulante e inhibitoria. La sociedad no dejará de paralizar al hombre y promover la dominación hasta que su fin se identifique con el de la humanidad.
24.- Creo que podemos y debemos esperar una sociedad cuerda que fomente la capacidad del hombre de amar a sus semejantes, de trabajar y crear, de desarrollar su razón y un sentido real de sí mismo basado en la experiencia de su energía positiva.
25.- Creo que podemos y debemos esperar la recuperación colectiva de una salud mental caracterizada por la capacidad de amar y crear, por la liberación de los lazos incestuosos con el clan y la tierra, por un sentido de identidad basado en la experiencia que tienen de sí mismo el individuo como sujeto y agente de sus facultades y por la capacidad de influir en la realidad exterior e interior a uno mismo, logrando el desarrollo de la objetividad y de la razón.
26.- Creo que, mientras parece que este mundo nuestro enloquece y se deshumaniza, cada vez más individuos sentirán la necesidad de asociarse y colaborar con quienes compartan sus preocupaciones.
27.- Creo que estos hombres de buena voluntad, no sólo deben hacerse una interpretación humana del mundo, sino que también deben señalar el camino y trabajar por su posible transformación : la interpretación sin voluntad de reforma es inútil ; la reforma sin previa interpretación es ciega.
28.- Creo posible la realización de un mundo en que el hombre “ser” mucho aunque “tenga” poco ; un mundo en que el móvil dominante de la existencia no sea el consumo ; un mundo en que el “hombre” sea el fin primero y último ; un mundo en que el hombre pueda encontrar la manera de dar un fin a su ida y la fortaleza de vivir libre y desengañado